Mayo 2013 |
Nuestra vida como cristianos se basa en el amor.
La misericordia del Padre nos abre los brazos, nos acoge y nos perdona. María,
madre de Dios, nos protege y nos acompaña siempre.
Con esta disposición nos entregamos mutuamente en
el Sacramento del Matrimonio. La donación al otro da sentido al sí que
pronunciamos el día de nuestra boda.
Que tengáis la seguridad de que las puertas de la
Iglesia están abiertas para todos.
¡Gracias por vuestra actitud y por la decisión
tomada!
¡Felicidades!
No hay comentarios:
Publicar un comentario